Skip to main content

Autoconsumo: qué es y cómo puede hacer que tu empresa (y flota) sea más sostenible

A la subida del precio de los carburantes se une la actual crisis energética. Las empresas buscan alternativas para ser más sostenibles y que esa sostenibilidad tenga un reflejo positivo en el balance de cuentas. El autoconsumo se alza como una opción perfecta para conseguir ambos beneficios (y más)

Nacho Garmendia

Por Nacho Garmendia

22 de noviembre de 2022

4 minutos de lectura

imagen de coche eléctrico con placas solares de fondo

Hace unas semanas, repasábamos las claves para diseñar la hoja de ruta hacia la sostenibilidad de una empresa, y hablábamos de los tips a aplicar de los recogidos en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), entre los que la lucha contra el cambio climático ocupa un lugar preferente.
 

A esto hay que añadir la actual crisis energética generada a raíz de la invasión de Ucrania. Las previsiones no son buenas, por lo que contar con una cierta independencia con respecto a las grandes compañías y distribuidoras de luz, puede marcar la diferencia entre una empresa de éxito y una a la que le cueste sobrevivir.

Autoconsumo

El autoconsumo se define como la producción de energía eléctrica a través de paneles solares u otros dispositivos que permiten satisfacer las necesidades energéticas de una vivienda, edificio o conjunto de edificios de forma totalmente independiente.

 

La fórmula de autoconsumo más extendida en España son los paneles fotovoltaicos; poco a poco y según la zona de instalación, van ganando adeptos las instalaciones minieólicas.
 

La ventaja más evidente del autoconsumo energético es el ahorro en las facturas de la luz, pero también hay otros beneficios, como reducir la dependencia de las compañías eléctricas, evitar los vaivenes de los precios y limitar nuestras emisiones de CO2.

Un poco de historia y legislación

 

En España, hay que remontarse a 2019 para encontrar los primeros pasos oficiales a favor de esta tecnología. Con el Real Decreto Ley 244/2019 se introducían una serie de mejoras para impulsar las instalaciones de autoconsumo. Tres eran los cambios más relevantes:

  • La norma reducía sensiblemente los plazos y procedimientos necesarios para la legalización de las instalaciones.
  • La energía autoconsumida quedaba exenta del pago de cargos y peajes.
  • Se aprobaba la compensación de excedentes (la venta por parte del propietario de la instalación de la energía generada pero no consumida) en instalaciones inferiores a 100 kW.

Autoconsumo fotovoltaico

La fórmula más empleada para el autoconsumo es la solar o fotovoltaica.

 

El autoconsumo fotovoltaico consiste en la producción de electricidad para el consumo propio a través de paneles solares fotovoltaicos. Estos transforman la luz solar que incide sobre ellos en electricidad gracias al efecto fotovoltaico.

 

Hay varios tipos de instalaciones fotovoltaicas de autoconsumo:

  • Las conectadas a la red están diseñadas para cubrir una parte del consumo eléctrico y así reducir la factura de la luz. Cuando la demanda de energía es superior a la generada por los paneles, se coge de la red; por el contrario, cuando se produce un excedente, esta se vierte a la red a cambio de un precio previamente pactado (esto se conoce como compensación de excedentes).
  • Las instalaciones de autoconsumo con sistema de almacenamiento no están conectadas a la red y no compensan excedentes porque la energía que no consume el edificio, se almacena en las baterías y se utiliza en picos de demanda, días nublados, etc.

Las segundas requieren una inversión mayor, pero son las recomendadas por los expertos, ya que, como norma general, la energía sobrante se vende mucho más barata de la que se compra en caso de necesidad.

Ayudas del Gobierno a la instalación de placas solares

A finales de junio, el Gobierno aprobó la concesión de 660 millones de euros, ampliables a 1.320 millones, para subvencionar la instalación de placas solares de autoconsumo, sistemas de almacenamiento y climatización.

 

La cuantía de las ayudas varía en función del beneficiario y del tipo de instalación. Así, se asigna un porcentaje sobre el volumen de inversión inicial de las empresas hasta llegar a un máximo. 

 

Las ayudas para instalaciones de autoconsumo fotovoltaico abarcan desde un 15% para una gran empresa hasta el 45% para una pyme o un sistema pequeño, inferior a 10 kW. 

Deducciones fiscales

La normativa contempla una serie de beneficios fiscales para las empresas que apuesten por el autoconsumo. La cuantía de estas deducciones depende del porcentaje de ahorro:

  • Se puede llegar a deducir un 20% de lo invertido en una vivienda habitual o que se tenga arrendada y en la que se haya realizado la instalación entre octubre de 2021 y diciembre de 2022.
    Para ello, se debe demostrar que se ha reducido un 7% de la demanda de refrigeración y calefacción a través de los certificados energéticos.
  • Para llegar a una reducción del 40%, se deberá acreditar que se ha reducido un 30% o más del consumo de energía no renovable.

En ambos casos, se puede acceder a este beneficio si se ha mejorado la calificación energética “A” o “B”. 

La deducción se podrá aplicar en la Declaración de la Renta del próximo año, en caso que se hayan realizado las obras antes del 31 de diciembre del 2022.

Claves para elegir una instalación de autoconsumo para la empresa

  1. Precio: El precio medio de una instalación oscila entre 6.000 y 8.000 euros, con un periodo de amortización de entre 7 y 9 años.
  2. Tamaño: Un panel solar fotovoltaico estándar mide en promedio de 1m de ancho y 1,7m de largo, o alrededor de 1,7 m².
  3. Potencia: La potencia de una instalación fotovoltaica se mide en kilovatios-pico (kWp). Se trata de una unidad de medida teórica que ayuda a cuantificar la potencia máxima que puede producir una instalación. De forma sencilla y aproximada, y en función del rendimiento solar, 1 kWp produce 1.000 kWh.

El periodo de amortización de una instalación solar de autoconsumo es de 8 a 13 años, dependiendo de las circunstancias particulares. Esto representa una rentabilidad de entre un 8 y 10%.

 

Respecto a la vida útil de los paneles solares, tienen una media de 25 años. Sin embargo, hay que tener en cuenta que, a partir de los 25 años, los paneles experimentarán un descenso de la producción de alrededor del 15%.

 

Para decidir qué tipo de instalación de autoconsumo es la adecuada para cada empresa, de qué tamaño y prever qué ahorro reportará, es fundamental conocer los datos de consumo actuales.

 

Las empresas con flotas de vehículos pueden encontrar en el autoconsumo una herramienta de ayuda para reducir los gastos de movilidad. A través del Informe para la Adopción de Vehículos Eléctricos (EVSA) de Geotab podrán decidir cuántos y cuáles de sus vehículos de empresa pueden ser sustituidos por eléctricos y, después, emplear la energía generada por las placas de autoconsumo para recargar la batería de sus nuevos coches eléctricos sin apenas gasto ni emisiones.


 

Suscríbete al blog de Geotab


Nacho Garmendia
Nacho Garmendia

Partner Account Manager

Suscríbete al blog de Geotab

View last rendered: 10/22/2024 08:03:38